Maullidos Urbanos
Gato de Barrio
Durante la actual pandemia de covid-19 México se ha ubicado entre los primeros lugares con situaciones negativas, como ser la nación 83 de 84 que menos apoyos económicos ofreció a sus ciudadanos para superar la crisis; estar entre los países con mayor número de decesos; la que ha ocultado el número real de muertos, así como el que tiene mayor cantidad de personal médico contagiado y fallecido por carecer de medidas de protección.
Son datos y estadísticas difundidos por diferentes instancias reconocidas o, como en el caso de los decesos, a la cifra diaria reportada por la Secretaría de Salud se le deben agregar las emitidas por el Registro Civil y el Inegi en el renglón de exceso de muertes, es decir más allá de las regularmente registradas pero ahora a causa del covid-19.
Sin embargo, para el gobierno federal la pandemia ya está controlada y superada, incluso ya anuncia la realización de eventos masivos, como el del 20 de noviembre para celebrar el inicio de la Revolución Mexicana, ah, pero eso sí, recomendado usar
Ahora se agrega otro récord negativo: entre los países con el mayor número de fallecimientos a causa del coronavirus, México ha sido el más afectado en cuanto a la pérdida de cuidadores primarios y secundarios por cada 100 muertes reportadas.
No son cifras inventadas ni pertenecen a los ’otros datos’ manejados desde presidencia de la república, sino provienen del reporte ’La orfandad ocasionada por la pandemia’, elaborado por el Instituto Belisario Domínguez del Senado, desarrollado con datos de la Organización Mundial de la Salud y del Imperial College London,
Se precisa que en septiembre, por cada 100 fallecimientos por covid-19, en Estados Unidos, 23 menores perdieron a sus cuidadores primarios o secundarios, es decir, a su mamá, papá, ambos o abuelos que vivían con ellos; en Brasil, fueron 46; en India, 87; en Perú, 60; en Rusia, 47; en Reino Unido, nueve; en Indonesia, 56; en Italia, cinco; en Colombia, 67, pero en México la cifra asciende hasta 90.
Aunque el estudio precisa que esa ’cifra va en aumento’; se reconoce que los apoyos ofrecidos por el gobierno a los menores de edad en condición de orfandad ’son insuficientes’.
Se concluye que es necesaria la intervención del Estado para superar las negativas consecuencias por la orfandad de menores y adolescentes con políticas públicas eficaces, a fin de poder salir adelante, pero ante las conocidas actitudes y respuestas del gobierno federal se debe anticipar que será un propósito imposible de cumplir.